Tigger in Istanbul (Día 5 y Final).

Último día. Despedida. Y retorno a la normalidad. Para muchos que estaréis hartos de leer los 5 días, diréis: “Por fin acabaaa!!:-P”, pero tanto pata contarlo al resto como para mi de recuerdo, quería relatar mi viaje allí día a día.
Que pena me dio levantarme sabiendo que eran mis últimas horas… El último desayuno tan agradable en la azotea. Ya pasó la última noche… Pero no todo puede durar siempre y se haría pesado… pero daba pena acabarlo.
Esa mañana fue aprovechada para dar un paseo tranquilo con la estupenda mañana de sol que amaneció, tras hacer el check out y dejar las cosas en consigna. Recorrer la zona, querían visitar con más tranquilidad Santa Sofía que la vimos mucho mejor que el otro día. Impresiona saber su antigüedad y todos los elementos que la contienen, y estar allí viéndolos. Impone un respeto.
Ya que hacía buen día, que bien se estaba sentado en un banco de la plaza que une las 2, leyendo la prensa nacional nuestra, y tomando un bollo típico de allí que entraba solo :-P Para después ir a comer pronto a un restaurante de gente de allí, sin alcohol y menús hechos para ellos. Con un ambiente nada turista. Que albóndigas mas wenassssssss!!!!!!!!!:-P
El último café turco fue en el hotel haciendo tiempo mientras llegaba el transfer y así escribía las postales y las dejaba allí para enviarlas. Y ahí acababa todo al llegar la furgo, subir y encarrilar la carretera de la costa camino del aeropuerto donde hubo que pasar cerca de 4 controles de seguridad antes de subir al avión.
Para mi una gozada de fin de viaje al ser otros 2 vuelos más que disfrutar. Es algo curioso que fue el primer día de mi vida que veo anochecer 2 veces en media hora :P Porque lo vi anochecer en el aeropuerto esperando al avión y luego cuando despegó ya de noche arriba estaba el sol camino de Grecia y otra vez le vi anochecer bajo las nubes. Y un cielo estrellado surgió, con la estrella polar de guía y la luna a mi izquierda.
Que bonito fue ver dejar abajo las luces del puerto y los barquitos sobre el mar y la sensación de saber que las luces que iba viendo abajo eran de Bulgaria, Croacia y la costa italiana. Ya en Milano, como no, tocaba el capuccino de la vuelta :-P y comprar en la Ferrari Shop!!!:-D Que pasote!!!!Y que pijadas :-P Me encantó que es el primer avión que me subo en la propia pista por la escalerilla delantera y no por tubo en la terminal. Con fotos entre niebla y luces muy chulas. Un breve viaje por el que vi Mónaco, la costa de Genova, Barcelona y todos los pueblitos españoles hasta la inmensidad de luz de Madrid y el aterrizaje final.
Que lástima saber todo lo que he dejado atrás. 4000km en unas horas. Y estaba aquí como si nada hubiera pasado. Sólo las fotos y recuerdos hacen ver que estuve allí. Una escapada estupenda que necesitaba y me ha cambiado, como a mi hermano que era otro. Era él hace 10 años. Simpático, hablador, cariñoso… No como ahora, hurón, callado y seco. En una ciudad que me ha acogido muy bien y de la que me voy con buen recuerdo. De sus gentes, su vida, su gastronomía y su ambiente.
Próximo destino: ¿Bostón?; ¿Nueva York? O ¿París? :-P