domingo, 25 de febrero de 2007

Ni el tiempo ni nada puede separar a quienes se quieren de verdad...

Estas líneas completan a las de ayer ya que tras la cena del cumple de mi hermana, entro en mi webs por mirarla un poco y me da por pinchar en meses antiguos a boleo a ver que ponían, y casualmente di a Febrero de 2005, y ahí están los primeros escritos de Lunna, de un tiempo que al parecer estuvimos un rato sin hablar. Pero el caso es que leer desde ahí en meses sucesivos sus letras incluso las pocas que ponía la Peke, por un lado me han hecho sonreir mucho, y por otro, ver esas frases relativas a no volver a separarnos nunca porque ambos lo sentiríamos mucho, sobre el miedo a que su marcha fuera me afectara de tal modo que todo se rompiera (y así fue :-( en parte), sobre el sentir mútuo de querernos mucho y tantos comentarios más que han producido que tras mucho tiempo, no pudiera evitar un llanto al notar lágrimas por mis mejillas. Será que me pille algo sensible por lo puesto ayer que fue como un toque de atención, pero me pongo a día de hoy y echo días hacia atrás rápidamente y veo cómo se van y se van los días y los meses y me arrepiento muchísimo de cómo ha ido todo, de que haya estado de lado mucho tiempo por mi culpa, de no haberla cuidado ni tenido en cuenta como debiera, mantenido el día a día vivido afrontando los problemas y no dejándolos atrás, de haber perdido una etapa juntos que no tiene solución y cuanto más se me complica todo más me cuesta buscar cómo ser el que era con ella. Y como hablé hace poco con "Pink", se une un miedo a lo desconocido. Se que puede sonar tonto ya que no tendría nada que temer si sólo somos 2 personas que saben que se quieren y sólo desean ir retomando lo que se perdió. Pero...
Es posible que sea el sentimiento de no perdonarme que haya transcurrido tanto tiempo y por unas cosas o por otras tenga a muchas personas lejos de mi sin querer, y esa sensación de culpa se que me cohibe ante esas personas, y en su caso, sabiendo que es mucho más especial que nadie en mis 27 años de vida, más me cuesta mirarla a los ojos.
Como puse ayer sobre sentimientos que son tan fuertes, lo se porque en buenos momentos y en compañía juntos, se que la quiero enormemente y ni antes ni ahora, sigo afirmando que nunca concebía mis días sin ella por todo lo que vivíamos juntos y lo que quedaba por vivir. Adoro esa época, lo que siento cuando estamos juntos, y la alegría compartida el uno con el otro cada día, aunque haya malos recuerdos, cosas que nunca se perdonan u olvidan, y momentos de crisis; son cosas pasajeras que no importan; sólo importa el querer que aunque me vaya a costar lo mío mucho, llegar al punto donde estábamos, o si ya es imposible, lo más cerca posible.
Llegué a pensar que tras ese tiempo y en otra vida distinta, acabaría olvidándome e incluso mejor que cuando estaba a mi lado por los quebraderos de cabeza que la di por cabezota también. Se que en parte no es así y me alegro que al anhelarme también una esperanza se escribiera.
Aunque en verdad quiera hacerlo bien pero no se cómo hacerlo...:-S Y tema herir a alguien que nunca quise hacer sentir mal. Pero ahora mismo sólo querría que la Lunneja que ilumina mi corcho debilmente, coja energía y brille a plena potencia.
Y aunque no sepa por dónde empezar, si se que en dos palabras: La quiero.

No hay comentarios: