martes, 11 de abril de 2006

Un Ying y un Yang.


Doble encuentro inesperado.

Ying.

Un trozo de vida pasada que permanecía almacenado en un recuerdo olvidado surgió a flote en el sitio más inesperado. Y esa fugaz imagen que reconocí al instante me llevó a aquellos años, despertando todo aquello de entonces. Un cruce de rápida mirada que ambos reconocimos al instante, tras muchos años sin verse. Seguía igual que la última vez que la vi, sabiendo que ese día sería el último. Pero en mi mismo portal, el sitio más inesperado, tras 4 años, me fijé en esos ojos y supe de quien eran. Hacía mucho que no los veía pero nunca los habría olvidado. Aquellos que desaparecieron sin un Adios. Sólo nos cruzamos, pero no saludó y siguió su camino que por un segundo quiso cruzarnos tras estos años.

Yang.

Pero otras fotos y letras se añadieron al día y a lo que mi mente pensaba. Cómo la echo de menos. Tanto tiempo, tanto ocurrir y tanto temer por ello. Por días sin ella, por semanas sin su compañía, en un abismo que alejó mi silueta de sus ojos de tal modo que hacía temer. Tantas experiencias buenas y malas... Recordar la gran cercanía que invadía de felicidad al día, y de golpe desapareció.
Un trabajo que contribuía a que la distancia fuera mayor y mayor la añoranza. Hasta ver esas fotos, esas letras… Por ver esa cara, esa sonrisa, esos ojos que tanto echo de menos. Y parece que nunca vaya a ver. Un ahogo da al pensar eso. Pero ya veo que es una realidad a la que tuve que hacer frente con fuerza. Y se ha sobrellevado hasta hoy, unas mejor, otras no tanto.
Pero no me gusta esa realidad. Sobre todo, hoy.

Y la pregunta sería:

¿Cómo?.

PD: Por ello, un "Felicidades" hoy en su día, a alguien ausente.

"El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles, es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes, es la oportunidad". ---> Para mí es la oportunidad de todo aquello desconocido que hasta ahora era inalcanzable y ahora está por llegar :-)

#En compañía de: El silbar del viento.

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